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Titiritero de palabras

Nota aclaratoria

Nota aclaratoria

Ante ciertas dudas en l@s lectores/as suscitadas por su post "Desde mi libertad", este Titiritero de Palabras quiere aclarar lo siguiente:

- El citado artículo es, básicamente, una obra de ficción, en la que este Titiritero, es cierto, recoge algunas pequeñas anécdotas reales para construir una historia, en lo esencial, ficticia

- Que Sergio sigue residiendo en el mismo domicilio en que ha vivido los últimos 34 años, donde le podéis localizar presencialmente y en el teléfono fijo, aparte de los otros medios habituales.

- Que el único hospital psiquiátrico que ha pisado Sergio en toda su vida es el antiguo conocido popularmente como "La Cadellada", pero jamás en condición de interno, sino de pequeño, porque, como muchos de la zona de Teatinos sabéis, era el "parque" donde los niños del barrio íbamos a jugar, andar en bicicleta o en patines.... En aquella época también había muchos prados en esta zona, pero eran prado puro, y La Cadellada estaba mucho mejor para ciertos juegos y deportes (tenían una pequeña cancha polideportiva con canastas y porterías, había caminos asfaltados para andar en bicicleta pero apenas circulaban coches más que los de algún trabajador que lo usaba para acudir a su tarea, y la velocidad estaba limitada creo que a 20 o 30 kilómetros por hora con indicaciones de "Centro sanitario, circulen con precaución".

- Que como es bastante sabido, a Sergio no le gustan las armas. En particular, no lleva ningún cuchillo bajo el abrigo.

- Que es cierto que Sergio tiene una vecina a la que encuentra en su portal cotidianamente y, dado que es una de las personas que la escucha, suele tener dificultades a poder abandonar la conversación y conseguir entrar o salir de casa. Que es cierto también que la antedicha vecina tiene la costumbre, que a Sergio le desagrada bastante, de asirle fuertemente del antebrazo y agitar. Que en particular, la citada vecina suele asir con más fuerza el antebrazo de Sergio y agitarlo con más vehemencia cuando se entusiasma advirtiéndole del peligro que suponen para España y para tod@s nosotr@s l@s que su vecina considera los peligrosos sinvergüenzas que gobiernan actualmente nuestro país. Que, por cierto, Sergio carece de la percepción del riesgo que suponen para este país los actuales miembros del gobierno, si bien respeta escrupulosamente, como no puede ser de otra manera en democracia, la opinión de su vecina. Que no obstante lo nervioso y molesto que pone a Sergio el poderoso agitar de su antebrazo con la mano fuertemente apretada, Sergio promete que nunca jamás le ha hecho un rasguño a su vecina. Que, eso sí, puesto a confesar, este Titiritero admite que cuando Sergio considera que lleva ya demasiado tiempo escuchando el relato del telediario y de los terribles males que acechan este país, tiene la mala costumbre de decirle a su vecina que le perdone pero que tiene mucha prisa y que otro día continuamos hablando, aunque lo de la prisa sea una absoluta mentira. Que este titiritero incluyó la anécdota de su vecina en el relato de anteayer como una pequeña venganza por los malos ratos pasados siendo vigorosamente agitado por Angelita, que, por cierto , no se llama Angelita (obviamente, le cambié el nombre, y puse uno supuesto).

Que Sergio lleva más de veinte años sin ingresar en ningún hospital, desde una apendicitis que tuvo de pequeño que remitió espontáneamente, y que espera que pasen muchos más años sin ingresar en ninguno.

Que Sergio, hasta el momento, y que se sepa, nunca ha padecido paranoia.

Que el único juicio que ha tenido Sergio en su vida ha sido civil y, por cierto, lo ganó ( para ser exactos, lo perdió en primera instancia pero lo ganó en Apelación), por una pequeña cantidad de dinero que la Seguridad Social le embargó indebidamente. De momento, Sergio no ha tenido nunca ninguna cuestión penal de la que contestar, ni tan siquiera una multa de tráfico.

Lo que se pone en general conocimiento, por parte de este juntador de letras títeres, en Oviedo, a 1 de abril de 2007

P.S.: El relato de la vida del titiritero en el Hospital Psiquiátrico Penitenciario iba a ser una serie que continuaría en sucesivos posts periódicos, pero visto lo visto, tengo miedo a asustar de nuevo a mis amigos, así que estoy pensando que mejor lo dejo :-(

 

5 comentarios

Fátima -

Jooo...yo fui una de las pardillas que caí en el falso internamiento de Sergio, pero menos mal que no la única!!empezaba a pensar que era demasiado inocente...por cierto el Haloperidol como argumento desvaratador no me convence. Saludos

Sergio -

Ah , por cierto... ¿ Conocéis imdb.com, la Internet Movie Data Base (que, por cierto, es propiedad de Amazon) ?

En la IMDB , para cada peli, cuentan los fallos que le encuentran en el argumento....

Si os fijáis, "Desde mi libertad" tiene uno evidente... En la situación que relata, de Haloperidol no te dan un trago.... ¡ Te lo inyectan !

( no me preguntéis por qué lo sé xD )

Sergio -

Mis más sentidas disculpas. Estoy consternado por el equívoco, como os cuento en un email privado. No se me pasó ni por un momento por la cabeza que nadie pudiera tener la más mínima duda de que era una ficción jocosa :-( Y por lo que veo, si hubiera intentado obtener el resultado obtenido deliberadamente no lo habría conseguido :-(

Por cierto, maf, en Italia el 1 de abril también es el día de las bromas, no sólo en los países anglosajones. En Italia lo llaman Il giorno del pesce d'aprile, vaya usted a saber por qué.

Que tengáis un buen día.

Maf -

Lo mismo digo, casi estaba buscando en la hemeroteca de lne cuando recordé que el 1 de abril es el equivalente anglosajón a "el día de los Santos Inocentes"

chus -

Pues yo acabo de leerlo ahora y casi me matas del susto :-(