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Titiritero de palabras

Que se beseeen, que se beseeen :-)

Que se beseeen, que se beseeen :-)

 

Llega a los medios en los últimos días una información según la cual, la canciller alemana, Angela Merkel, habría dado traslado, por formal vía diplomática, a través de un escrito presentado por el embajador alemán ante París, de una instrucción tajante de que el Presidente de la República, Nicolas Sarkozy, se abstenga de mantener contacto físico con la jefa del gobierno germano, dado que el elevado grado de contacto que el Presidente Sarkozy establece con sus invitados la molesta profundamente. La oficina de la Canciller, no obstante, ha negado que se haya llegado a tal extremo, si bien yo, personalmente, no me lo creo, y estoy convencido de que la nota diplomática existe.

Es de lamentar que a estas alturas de la vida, y con lo que se conoce sobre el lenguaje no verbal, las diferencias interculturales, y el hecho de que Angela Merkel se haya criado en la ya inexistente RDA, que no sólo era un país germánico, con lo que ello conlleva respecto a la cultura del contacto físico, sino un régimen stalinista, lo que añade frialdad a la frialdad. Seguramente el Presidente Sarkozy debería haber sido más prudente, si bien, con tanta luz y taquígrafos, no creo que a nadie le quepa la menor duda de que las intenciones del mandatario no eran en ningún caso molestar, ofender, ni mucho menos aprovecharse de la dignataria. En todo caso, es muy razonable el criterio de, ante la duda, limitar el contacto físico, y pecar mejor por defecto que por exceso, pues los errores por exceso suelen dar lugar a situaciones muy desagradables para todos.

El caso es que en estos días se convoca una cumbre del G-8 ampliado, donde, por cierto, Nicolas Sarkozy podría tener mucho que decir sobre la posibilidad de que se invitase a España, que ( ¿aún? ) no ha sido invitada. Uno, que es un guasón, no puede evitar hacer una pequeña coña, sin mala leche, quede claro: el Presidente Zapatero podría comprometerse a dejar espacio a los excesos afectuosos y mimosos del galo, y dejarse coger de la cintura para la foto oficial, sustituyendo el habitual afectuoso apretón de manos entre los dos por un par de sonoros besos en las mejillas. La posibilidad de que nuestro país, importante en muchos sentidos - singularmente por la universalmente reconocida ahora prudencia de nuestras entidades financieras, en particular los principales bancos - , país europeísta convencido, uno de los medianos tirando a grandes por superficie, población y PIB de la UE , esté sentado en la mesa donde probablemente se sienten las bases del Nuevo Orden Financiero Internacional bien vale una misa.

Bromas aparte, si van a estar presentes las potencias emergentes, con Brasil, India y China a la cabeza, si va a estar presente Rusia, si van a estar presentes los miembros del G-7 más Rusia, la presencia de uno de los países más industrializados, que ya ha superado a Italia en renta per cápita y que ha tenido en los últimos catorce años, con presidentes del gobierno de ambos colores, una prudencia extraordinaria que hoy echan de menos otros, con una dotación del fondo de reserva de la Seguridad Social de más de 60.000 millones de euros, que dotaron tanto Rodrigo Rato como, en mayor medida, Pedro Solbes, a quien hace apenas un año yo pedía, equivocadamente hoy veo, un poquito más de mano abierta en el gasto público y que hoy reconozco que hizo muy bien siendo prudente en un momento aún positivo de las variables macroeconómicas, para tener margen de respuesta para una situación como la actual, la presencia de España sería tremendamente razonable. Lo que se ha oído, parece que filtrado por medios oficiosos, de que Moncloa habría sugerido que se ampliase la lista de los ya formalmente invitados con España y un país árabe a iniciativa de Sarkozy, podría ser una gran solución. No en vano muchos de los países con mayores reservas de petróleo y gas natural son árabes, y una representación de nuestros hermanos vecinos del mediterráneo, por ejemplo un representante del Mahgreb, o una potencia petrolera del Pérsico, parece buena idea.

Y si no , insisto, a una mala..... ¡ que se besen ! :-)

 

Que pases un buen día.

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