Blogia
Titiritero de palabras

El valor de una sonrisa

El valor de una sonrisa

Hace unos meses, me decía la encantadora R. que tenía ganas de irse de cooperante "a un lugar donde aún se apreciase el valor de una sonrisa sincera".... Qué hermosa frase, por cierto.... Al final, se ha ido al extranjero, antes seguro incluso de lo que preveía, y la veo muy feliz, por cierto.....

Creo que no es un gran secreto entre mis personas más o menos allegadas que estoy pasando por una mala época, con bastantes problemas vitales a la vez.... Hoy estaba un poquito abrumado por ellos ( por cierto, supongo que etimológicamente abrumado tenga que ver con la bruma ).... Cuando, al mediodía, coincidí con una chica con la que había compartido , hombro con hombro, nuestra participación para colaborar en el Día Internacional Contra el SIDA del pasado 1 de diciembre, y habíamos coincidido , después, el propio día, repartiendo folletos informativos sobre el VIH... Iba liada y al principio no me vio; en cuanto me vio, sin embargo, puso una amplia sonrisa y me saludó animosamente con un "¡ Hasta luego, Sergio !". Fue para mí un insntante de gozo supremo.... Muchas cosas van mal, buena parte de ellas porque yo he cometido errores, que, no obstante, le hacen aprender a uno y le permiten evitar repetirlos.... Pero cuando una persona que me ha conocido un poquito me sonríe animosamente, me dirige un saludo enérgico ( y hasta energético ) y se acuerda hasta de mi nombre pasados los meses, creo que algo , asímismo, debo de haber hecho bien.... Y , si no es así, que hay seres humanos espléndidos que intercambian errores míos por sonrisas suyas.....

El valor de una sonrisa sincera, que lo llama R.

Feliz día, chicos.

( nota: dedicado a R. a S., y a M.J. )

2 comentarios

Sergio -

Uff.... si yo te contara, Guti. A mí normalmente como no me peguen una colleja, voy por la calle y no veo ni a mi madre, soy un puñetero desastre :)

Guti -

Yo aprecio mucho (creo) a las personas (a la masa mucho menos) pero me fastidia sobremanera una cosa: creo que muchas veces no se nota como debería, porque primero, soy un despistao, y segundo, soy fatal para recordar nombres. Fatal.

Hago esfuerzos por mejorarlo, pero me pregunto cuántas sonrisas o saludos como ese habré dejado sin dar, no por falta de aprecio, sino por mis propias limitaciones. Es una pena. Creo que la mayoría de las veces la infelicidad se debe a malentendidos, y me pregunto si habrá gente que crea que no la valoro o aprecio... porque no la he visto :-)